Realizan Foro en Defensa del Medio Ambiente, en Tecámac

* Temascalapa es receptor de residuos nucleares; “es terrible lo que está pasando porque los contaminantes están ya minando la población”

* Al cerro de San Pablo Tecalco le pretenden tumbar de 15 a 80 metros “porque estorba para el paso de los aviones” hacia el nuevo aeropuerto

Expositores en coloquio desde el Salón Ejidal el pasado domingo 22, durante la presentación del Foro en Defensa del Medio Ambiente, en Tecámac. Fotos: Especial.

Jorge Villa | miércoles 25 de octubre de 2017

Tecámac, Méx., 25 de octubre.- Estudiosos, activistas sociales y especialistas del medio ambiente, y de los pueblos originarios de la Cuenca de México, expusieron temas acerca de la importancia del patrimonio tangible e intangible de esas aldeas nativas; la impureza y escasez de agua, la contaminación de basureros; la devastación de cerros con fines económicos y huellas históricas arqueológicas borradas por nuevos asentamientos humanos; destrucción de minas, envenenamiento de pozos de agua y los residuos nucleares enterrados en Temascalapa, entre otros contenidos.

Ante la audiencia reunida en el Salón Ejidal de este municipio el pasado domingo 22, la presentación del Foro en Defensa del Medio Ambiente organizado por Patricia Galindo Alarcón, trajo consigo significativas aportaciones, latentes pero visibles ayer, menos ocultas hoy en día. Y más graves.

La antropóloga María de la Asunción García Samper, directora del Centro de Estudios Mesoamericanos, A. C., describió la importancia del patrimonio histórico-cultural y arqueológico tangible y también intangible de los pueblos originarios del norte de la Cuenca de México.

¿Qué ha pasado con los ‘ojos de agua’ limpia que existía en la parte de Ojo de Agua y Santa Lucía en Tecámac, o las fuentes de Ozumbilla y los arroyos de aguas dulces que caían desde la cima del cerro de Tecalco, Tepetle o mejor conocido como Chiconauhtla?

Relató cómo se conformaron estas villas con la llegada migratoria de diferentes grupos étnicos que arribaron a la Cuenca de México, siendo uno de los más importantes la migración de Xólotl y su esposa la señora de Tampico-San Luis Potosí de la etnia de los huastecos. A su llegada se asentaron en las cuevas y abrigos del Monte Xoloc, fundando la población de Xoloc y Acozac, ambos altepetls (asentamientos) importantes en la fundación de todo Tecámac.

Antropóloga, María de la Asunción García Samper.

García Samper aclaró que su exposición es parte de su proyecto “Patrimonio e identidad de los pueblos originarios”, y el tema con que inició fue sobre “Patrimonio e identidad de los pueblos originarios hídricos de la Cuenca de México”.

Detalló ampliamente la historia de esta región de estudio y cómo ello marca nuestra identidad chichimeca-otomi acolhua, “que nos hermana con los municipios de Teotihuacán, Acolman, San Martin de las Pirámides y claro, con los pueblos de Ecatepec, de habla otomiana nahua”.

Y lo es aún más -dijo-, con todos los pueblos del sur de la cuenca de México: Xochimilco, Tláhuac, Coyoacán, Chalco y otros. “Nuestra lucha por nuestro patrimonio e identidad está ligada a la tierra y al agua que son fundamento de nuestros pueblos originarios hídricos”, expresó

Escasez de agua en Tecámac

Leonardo Contreras Escamilla, enseguida, habló de la contaminación y la escasez de agua en Tecámac.

Dijo que siendo un elemento de vida de los pueblos, además que la están envenenando con los desechos de los basureros que la contaminan con lixiviados, están las compañías que se están apropiando de los derechos del vital líquido para convertirla en producto comercial que luego nos venden embotellada o por otros medios.

Sostuvo el abogado Contreras Escamilla que no se debe privatizar el vital líquido que pertenece a los pueblos hídricos originarios de la Cuenca de México al tiempo que preguntaba a 150 personas: “¿Qué ha pasado con los ‘ojos de agua’ limpia que existía en la parte de Ojo de Agua y Santa Lucía en Tecámac?, ¿o las fuentes de Ozumbilla y los arroyos de aguas dulces que caían desde la cima del cerro de Tecalco, Tepetle o mejor conocido como Chiconauhtla?”.

A pesar de la exigencia de los pobladores de los municipios de Ecatepec, Acolman y Tecámac, de frenar la devastación del Cerro de Tecalco, las autoridades federales desoyen las quejas. Foto: Román Vázquez/Internet.

Cerro que estorba, tezontle y aviones

El cerro de San Pablo Tecalco, entre los municipios de Acolman, Ecatepec y Tecámac, aunque no está catalogado como área protegida, nada lo libra de la devastación que padece ni de la depredación de la flora y fauna en su entorno, señaló el economista Carlos Torres Landa.

Informó que empresas quieren derruir casi 15 metros de la punta del Cerro “porque estorba para el paso de los aviones hacía su aterrizaje en el nuevo Aeropuerto”.

Hizo observaciones acerca de la irregular apropiación de la tierra y en consecuencia del mal manejo del agua de los pueblos originarios que se asientan en las laderas del cerro, como es el caso de San Pablo Tecalco, entre otros. También señaló la contaminación provocada por el basurero de Ecatepec-Chiconauhtla, del aire y de los mantos friáticos, “ya casi no hay agua para nuestros pueblos”, lamentó.

Torres Landa advirtió sobre los nuevos fraccionamientos. “Las huellas arqueológicas e históricas que nos dan identidad sufrirán la destrucción total debido a los nuevos asentamientos humanos, y a la destrucción originada por las minas de Tezontle, que está avanzando muy rápido”.

Basurero de 5 mil metros cuadrados en Chiconautla; la filtración de lixiviados daña los mantos freáticos, medio ambiente y a pobladores de los municipios de Acolman, Ecatepec y Tecámac. Foto: Tomada de Internet.

(Nota al margen: cuando se hizo referencia a los 15 metros que quieren quitarle al Cerro, un comentario entre el público quedó grabado en el dispositivo: “la información que nos ha llegado a nosotros es que son 80 metros lo que quieren bajar al cerro para poder utilizar la piedra de tezontle para las pistas del Aeropuerto, así como la grava y la arena”).

Temascalapa y los residuos nucleares

Alan Martínez Cervantes ha tenido que enfrentarse a políticos y gobiernos municipales, en su lucha y la de otras personas, contra la imposición del gobierno de crear cementerios nucleares en su pueblo, Temascalapa, al noreste de Tecámac.

En este municipio, “es terrible lo que está pasando en nuestra tierra porque los contaminantes nucleares están ya minando la población originaria y la ponen en peligro. Esto es porque el gobierno ha decidido enterrar en Temascalapa residuos nucleares, que afectarán la vida de nuestros conciudadanos”, denunció.

Por último, la maestra Patricia Galindo Alarcón mencionó lo que ocurre con la contaminación proveniente de los basureros que se han desarrollado en campos ejidales de San Lucas Xoloc y Los Reyes Acozac.

“Se ha perturbado la vida rutinaria de la comunidad, envenenando sus pozos de agua y el mismo manto friático, poniendo en grave peligro a los habitantes de las comunidades. Y lo mismo pasa también con el medio ambiente contaminado, ya que se está respirando elementos nocivos para el desarrollo de la vida en esta región de Tecámac”.

Sitio donde se efectuó el foro ambiental.