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Domingo 6 de octubre de 2019

Nadie esperaba que en este gobierno México se convirtiera en la cárcel para los migrantes que utilizan nuestro territorio para llegar a Estados Unidos, convertidos de facto en un Tercer País Seguro para los gringos que no quieren que esa nación de migrantes siga recibiendo más, ahora que se promueve la supremacía blanca desde el gobierno de Donald Trump.
No cabe duda de que los migrantes de ahora extrañan la laxitud de los gobiernos neoliberales de antes que los dejaban pasar por el territorio utilizando sobre todo la “bestia” para llegar a la frontera norte, no sin sortear múltiples peligros físicos y de la delincuencia que los desaparecía para llevarlos como esclavos a sus plantíos o fábricas de sustancias ilegales, de las que nunca salían vivos o eran masacrados como en San Fernando en Tamaulipas si se negaban.
En los tiempos de la transformación, la política migratoria del gobierno mexicano es peor que la de Estados Unidos en contra de los migrantes que llegan, incluyendo a nuestros paisanos, y en ese sentido los cambios son en contra de los derechos humanos y la dignidad de los migrantes de todo el mundo que ahora viven retenidos en el sur, en lugares que ni la Bordel Patrol tiene en Estados Unidos.
Y es que el comisionado del Instituto Nacional de Migración, Francisco Garduño, antes fue comisionado de las prisiones federales del país, de manera que no es una casualidad que haya convertido las estancias migratorias en verdaderas cárceles donde los derechos de las personas no tienen vigencia alguna en toda la frontera sur y en la frontera norte también.
Garduño comenzó su carrera gubernamental en la Secretaría de Gobernación en la década de los 70’s, en los tiempos de la guerra sucia contra los movimientos sociales y guerrilleros, de las desapariciones forzadas de muchos luchadores políticos y líderes naturales de las comunidades, así que tiene gran experiencia.
Desde Chile, un venezolano que fue detenido por migración en Cancún pese a contar con todos los documentos para internarse al país, fue vejado por la delegación migratoria, detenido e incomunicado durante varios días y devuelto a Santiago solo por ser venezolano y denunció que cientos de extranjeros, adultos y menores estaban retenidos en salas convertidas en cárceles privadas por las autoridades migratorias, donde están incomunicados y sujetos a la voluntad de los nuevos carceleros.
Lo mismo ocurre con cientos de africanos en Tapachula, la cárcel migrante de la Cuarta Transformación ahora al servicio de Trump que usa a México, para que la oleada de migrantes sea retenida y le sirvamos como muro de contención a los gringos.
Cientos de cubanos han sido repatriados en los aviones de la antigua Policía Federal, así como migrantes de otras nacionalidades de Centroamérica, de manera que aplicamos en México la conocida Ley Arizona aprobada en 2010 en ese estado de Norteamérica para criminalizar a la migración y negar el derecho de las personas a migrar en busca de un mejor futuro.
Con el carcelero Garduño adiestrado en la guerra sucia de Echeverría contra los movimientos sociales y doctorado como comisionado de las prisiones mexicanas, el destino de los migrantes a su paso por México no es halagador sino incierto y al servicio de las políticas del gobierno de Estados Unidos que nos usa, lo dijo Trump, como su patio trasero.

OMISIÓN OFICIAL

A diez meses de iniciada, esta administración sigue sin cumplir y hacer cumplir la ley misma que protestaron hacer en los gobiernos federal y de la Ciudad de México, porque los infractores de la ley no son castigados y se les permite realizar a modo toda clase de desmanes en la vía pública y ante la mirada expectante de las autoridades que “defienden más a un delincuente que a la propia dignidad del policía”, expresó el ex jefe de ellos.
Y es que en el aniversario del 2 de Octubre, fueron algunos manifestantes y otros grupos organizados como Marabunta, los que enfrentaron a los encapuchados y los denostaron públicamente para que con tantita pena, dejaran de hacer algunos desmanes, pero la policía indefensa recibió petardos y bombas molotov sin poder aplicar el uso legal de la fuerza a la que tienen derecho en esos casos para contener la violencia en contra de ellos y de las personas que participan en este tipo de concentraciones.
Perdido en sus diatribas bíblicas el gobierno cree que con una sanción moral los actos delictivos se van a terminar, bastaría que alguna vez los gobernantes acudieran, como nosotros los periodistas, a cualquier prisión del país para darse cuenta de que además de los cientos de inocentes que están ahí, los verdaderos delincuentes, todos creyentes, ni se inmutan de las faltas cometidas contra su religión del “no robarás, no matarás”, sino que al interior de la misma prisión lo siguen haciendo: “si mató a este cabrón ¿qué me pasará?, ya estoy en la cárcel” y sueltan la carcajada.
Por ello son universidades del crimen las prisiones no sistemas de readaptación social como se llaman, porque además los que cumplen sus condenas al salir no encuentran trabajo por sus antecedentes penales, una contradicción porque si ya cumpliste tu sentencia y quieres rehacer tu vida, te obligan de esa manera a seguir delinquiendo para sobrevivir ya afuera.
Esta semana las manifestaciones continuarán en la capital del país donde la falta de un gobierno que haga cumplir la ley ha convertido a sus habitantes y a quienes transitamos por su territorio, en rehenes de la violencia que algunos grupos promueven, ya sean ajenos o no, a los propios manifestantes.
Así que cuídese porque la Cuarta Transformación es la de portar pistola al cinto para evitar agresiones y que los más fuertes sobrevivan como en los tiempos del oeste norteamericano, cuando nos invadieron y quitaron la mitad de nuestro territorio.
Necesitamos un Sheriff o Alguacil, “nombre dado a la autoridad policial política y de justicia pública en vigor en varios países anglosajones” y donde nuestros paisanos si se sienten seguros, tranquilos del cumplimiento de la ley que hasta ellos acatan, aunque cuando vienen a México no lo hagan. Así estamos.

LEY BONILLA VA

Después del fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, de que el gringo Bonilla solo podrá gobernar por dos años Baja California, porque para ese lapso de gobierno fue electo y cuyo fallo se entiende es irrevocable, los morenistas que ahora son mayoría en el Congreso local, anuncian la publicación del decreto que amplía su gobierno a cinco años, como lo aprobó la anterior legislatura panista que fue maiceada por el ex director de Aduana, Ricardo Peralta, ahora subsecretario de Gobernación.
Catalino Zavala, presidente del Congreso de Baja California, anunció que publicarán la “Ley Bonilla” para extender el periodo, además que realizarán una consulta, costumbre de esta administración, para conocer el sentir de los bajacalifornianos sobre tal tema y si están de acuerdo entrar en desacato con la federación, por lo que rendiría protesta por un plazo no electo.
“Cría cuervos…” dice un dicho y parece que en la Cuarta Transformación son pocos los que comparten el llamado del presidente a la honestidad, fin de la impunidad, de no legislar leyes a modo como esta, de no mentir, no robar, no traicionar al pueblo, que en este caso solo lo eligió por dos años, ese es el sufragio efectivo dado en las urnas y no por cinco, porque quieren servirse con la cuchara grande, no olvidemos que Bonilla sirve a los Estados Unidos, donde ha sido electo en cargo diversos antes.

Comentarios a uliseshj@hotmail.com

Ra.

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