"Todo estuvo muy bien, lo que es inconcebible es la omisión de su más ilustre conservador de ese monumento de la patria, el licenciado en Derecho, colega, uno de los suyos, él siempre mecenas de mecenas del Estado de México y de Hidalgo, Don Saúl Uribe Ahuja. No lo decimos nosotros lo dice la historia:"
OPINIÓN
Por Teodoro
Rentería Arróyave
Lunes 21 de abril de
2025
Me llegó un boletín
del Poder Judicial del Estado de México sobre su “participación en el homenaje
a la heroína, María de la Soledad Leona Camila Vicario Fernández de San
Salvador, más conocida en la historia patria como ‘Leona Vicario’, que se llevó a cabo el 10 de
abril pasado, fecha de su natalicio, con el objetivo de reivindicar su
participación en el movimiento de Independencia de México y destacarla como
heroína y madre de la patria”.
El escenario fue la
Hacienda de Ocotepec, ubicada en Apan, Hidalgo, que fuera propiedad de Leona
Vicario en 1824 y donde residió hasta 1836. En el acto que fue organizado por
el Ayuntamiento de Apan, el PJEdomex exhibió el expediente de “Adjudicación de la
hacienda de Ocotepec a Leona Vicario”, resguardado en el Archivo Histórico de
la institución y que recientemente obtuvo su registro a Memoria del Mundo de
México en la UNESCO.
Todo estuvo muy
bien, lo que es inconcebible es la omisión de su más ilustre conservador de ese
monumento de la patria, el licenciado en Derecho, colega, uno de los suyos, él
siempre mecenas de mecenas del Estado de México y de Hidalgo, Don Saúl Uribe
Ahuja. No lo decimos nosotros lo dice la historia:
Saúl Uribe Ahuja, abogado-humanista, historiador y gran filántropo, nació en Orizaba, Veracruz en 1928. Comenzó sus estudios en el Colegio Simón Bolívar, en tiempos de la presidencia de Lázaro Cárdenas, durante la política educativa de la escuela socialista. Su formación se vio marcada por el carácter confesional de los hermanos lasallistas, bajo cuyo sello pedagógico concluye sus estudios de secundaria y preparatoria.
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Foto Tabloiderevista.com |
Sin embargo en 1946
se incorpora a la Escuela de Jurisprudencia de la Universidad Nacional Autónoma
de México, UNAM, en el antiguo edificio de San Ildefonso. Su capacidad y
entrega fue recompensada con el “Premio Miguel Lanz Duret”, por haber obtenido
promedio sobresaliente en sus estudios universitarios. De ese modo, y de la
mano de destacados juristas y maestros como Preciado Hernández y Héctor
González Uribe, así como Carlos Franco Sodi y Francisco González de la Vega en
Derecho Penal, se hizo de los conocimientos que forjarían el distinguible
carácter de su trayectoria profesional.
Su trabajo como
abogado sobresale de manera notable desde la fundación de su despacho. A partir
de él llevó a cabo litigios de casos emblemáticos, como la defensa a las
personas que rompían la roca destinada a cimientos, en el Pedregal de San
Ángel, llamados los “Picapiedra”; luchó también por el Patrimonio de la
Fundación “Gonzalo Río Arronte”, entre otros casos que le dieron prestigio como
litigante.
En 1950 -ojo-,
heredó de su padre la Hacienda de San Francisco Ocotepec, en los Llanos de
Apan. El lugar habría sido propiedad de la heroína “Benemérita Madre de la
Patria”, Leona Vicario, primera periodista y Mujer Prócer, corresponsal de
nuestra guerra de independencia.
Años después, en
2020, Don Saúl lograría que el Congreso de la Unión declarara el año 2020 como
“Año de Leona Vicario, Madre de la Patria”, con el respaldo de la Diputada
Marivel Solís Barrera. También consiguió mover el ánimo de un grupo de
distinguidos mexicanos en ciencia provenientes del ámbito científico, cultural,
artístico, político y, por supuesto, periodístico, para crear la “Fundación
Leona Vicario”.
Por su cariño a la
historia, Saúl reconstruyó el casco de la Hacienda de Ocotepec, lo enriqueció y
cuidó para enaltecer la finca y preservar los objetos pertenecientes a la
histórica dueña, hasta conseguir que el lugar fuera declarado “Monumento
Histórico”, por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Del mismo modo, a
través de una importante investigación y organización jurídica, contribuyó
directamente a que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la
Ciencia y la Cultura, UNESCO, declarara el Acueducto Tembleque como “Patrimonio
de la Humanidad”, en julio de 2015. Obra única, patrimonio cultural del estado
de Hidalgo, con 43 km de desarrollo perfectamente preservado, sin duda el
acueducto más largo y alto en el mundo.
A lo largo de su
vida, reunió un conjunto de más de 45,000 volúmenes en su biblioteca personal,
curada por una gran sed intelectual y la pasión característica de Don Saúl por
el trabajo histórico. Los libros permanecieron bajo el celoso cuidado de Don
Saúl en la Hacienda de San Francisco Ocotepec, hasta el año 2017 en que tomó la
decisión de donarlos a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo,
institución a la que mostró su cariño incondicional todas las veces que vio
oportunidad de hacerlo. Los ejemplares permanecen a resguardo de la Biblioteca
Central de la Máxima Casa de Estudios en Hidalgo, para su conservación y
provecho de todos los hidalguenses y visitantes.
En los últimos años
de su ilustre vida, Don Saúl ingresó como miembro distinguido de la Federación
de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, y del Colegio Nacional de
Licenciados en Periodismo, CONALIPE, en reunión gremial llevada a cabo en
Mexicali, Baja California. También fue reconocido como académico en la
comunidad de la Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG, bajo el
auspicio de la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM. Estos logros
confirmaron la grandeza innegable del trabajo intelectual de don Saúl Uribe.
Como muestra del
mutuo cariño y el amplio reconocimiento a su trayectoria, el maestro Adolfo
Pontigo Loyola, entonces rector de la Universidad Autónoma del Estado de
Hidalgo, le entregó en 2018, durante el Primer Informe de la Administración
Universitaria 2017-2023, la estatuilla “Spiritus Universitas” como benefactor
de nuestra casa de estudios, la cual representa el afán universitario
característico en las personas de genuina voluntad por el saber y el
conocimiento, gente de alto compromiso tanto académico como social y, por
supuesto, de firme y notable convicción moral.
OMISIÓN DEL
LICENCIADO SAÚL URIBE AHUJA, EL MECENAS DE MECENAS. 1928-2020. Su discapacidad
en sus últimos años de vida, jamás le impidieron cumplir con su misión de
abogado-humanista, historiador y gran filántropo. El poder Judicial del Estado
de México sabe y debe enseñarles a todos, pleitos de familia al margen, que la
omisión como la comisión son delitos.
Periodista y
escritor; presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo,
CONALIPE; secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de
Periodistas, FELAP; presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación
de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, Doctor Honoris Causa por la
Universidad Internacional, Académico de Número y Director de Comunicación de la
Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y
críticas en teodororenteriaa@gmail.com
Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le
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